miércoles

19ª Entrada- Hace frio, y tengo recuerdos que....

Hace frió y el termómetro del camión marca tres grados sobre cero, hago tiempo para que llegue mi compañero con su vehículo e irnos juntos a comer.
Esta semana tenia ganas de escribir pero no he tenido demasiado tiempo. Estoy escuchando a Mozart pues me relaja bastante, y a la vez voy repasando todos esos pensamientos que durante esta semana me van y me vienen a la memoria y recuerdo... sin no menos nostalgia la llegada al hospital el día que tú naciste, el diagnostico de preclancia que le hicieron a mama y el miedo en sus ojos cuando la deje sola con los doctores pues aunque era muy jovencita, ya había acabado la anatomía patológica y sabia de lo que le estaban hablando, y de que la iban a preparar para la cesárea un mes antes de tiempo, y mientras, yo hacia su ingreso en el hospital. Después vino el parto y a continuación el susto ya que no estabais bien ninguno de los dos, y lo largos que se hicieron aquellos tres días hasta que ambos salisteis de peligro. También recuerdo la entereza de las dos abuelas y el abatimiento de los abuelos.
Recuerdo que en esos días tube que ir a asearme a casa y tube que parar en medio de la carretera pues me dio un ataque de ansiedad que me impedía seguir conduciendo. Pero salimos adelante, mama se puso bien y tras un mes de incubadora pudimos marchar a casa los tres juntos.
Como todo, en tu corta vida, fueron momentos duros pero intensos y felices y las visitas a la sala de incubadoras.... ahh, estos recuerdos adormecían en mi subconsciente y hoy vuelven a mi memoria para arrancarme una sonrisa y una lágrima. Recuerdo de esos días la primera visita a la sala de incubadoras con mama pues ella aún no te conocía y ninguno de los dos te había tocado y nos dejaron tener un primer contacto contigo, mama subió en silla de ruedas pues aun estaba débil, y tras quedarse prendada con su bebe y por fin tenerte en brazos se olvido de que yo también estaba allí y me hubiera gustado tenerte en mis manos, pero no me importo ya que habría infinidades veces mas. Después vendrían tres años de infinita felicidad, tres mas de llantos y risas, de momentos duros... tan duros que seria imposible reflejar en un escrito por largo que este fuera la ansiedad y la impotencia que unos padres pueden llegar a padecer y solamente con tu cariño, tu simpatía, tu, tu, tu, ... se que hay muchos padres que por desgracia o están viviendo o vivirán momentos como los que nosotros pasamos y me gustaría que supieran que nuestro corazón y nuestro respeto esta con ellos y que comfien en que la medicina actual a evolucionado mucho, que cada día son mas los niños que salen adelante, que sean fuertes pues sus hijos necesitan de esa fortaleza que los padres estamos obligados a tener. Que confíen pues solamente con cariño y fuerza de voluntad sus hijos tienen un 50% de posibilidades de salir adelante y con otro 50% que aporta la medicina actual, hoy se sale adelante. Por ti hijo mio y por los demás niños que pasaron por lo mismo que pasaste tú. Os queremos. Nunca os olvidaremos.

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